jueves, 10 de enero de 2013

“El mercado de materias primas agrícolas en el Ecuador: el caso del trigo”



Por:
Laura Boada Molina
Nataly Torres Guzmán

I.          Introducción
El Ecuador ha experimentado cambios en su estructura productiva, a partir de la aplicación de políticas de liberalización comercial y apertura económica. A partir del decenio de 1980, la reestructuración de normas legales, hicieron posible procesos como: la privatización de empresas públicas; reducción de la participación del Estado en la economía; apertura a la inversión extranjera directa; flexibilización de las relaciones económicas; garantía de los derechos de la propiedad privada; liberalización de los mercados de bienes y servicios; entre otros, mismos que caracterizan a la economía ecuatoriana como pequeña y abierta al mercado mundial.
El libre mercado, en su máxima expresión –la globalización–, introdujo términos como la competitividad y por ende desafíos empresariales, en donde las grandes empresas internacionales han podido adaptarse rápidamente a los cambios mediante el uso de tecnologías, logrando un posicionamiento en el mercado, no así las empresas nacionales y más aún los pequeños productores. Con respecto a esto Guerrero plantea que “bajo esta óptica el mercado ya no es libre sino controlado o administrado en función de los intereses de los países o empresas más fuertes” (Guerrero, 2008: 309).
Esta situación está muy cerca de la realidad del sector agrícola ecuatoriano, sobre todo en con el caso del trigo; este mercado se ha vuelto totalmente dependiente de lo que pasa en los mercados internacionales, porque el país ha dejado de producir, para remplazarlo por importaciones, el problema principal, es debido a las ayudas alimentarias otorgadas través de la Ley Pública 480 de los Estados Unidos, por lo que se convierte en un elemento importante de estudio.

El propósito de este documento es analizar el mercado de trigo en el Ecuador, explorando la incidencia de factores externos tanto en la producción, consumo y en los precios, para ello tomaremos como periodo de estudio la primera década del siglo XXI (2000-2010), debido a la disponibilidad de datos.
Para el análisis, se utilizará información secundaria suministrada por: el Banco Central de Ecuador, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, la Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO (FAOSTAT), INDEXmundi, entre otros.
El documento aborda temas tales como marco teórico sobre mecanismos de mercado, para de esta manera considerar la situación del mercado de trigo en el sistema agrícola ecuatoriano y las posibles causas de la dependencia del trigo, para el consumo interno.
II.         Mecanismos de Coordinación: Los Mercados
La teoría económica neoclásica, supone que la estructura del mercado es perfectamente competitiva; en este sentido, el papel fundamental lo desempeñan tanto los compradores y vendedores que se adaptan al llamado precio de equilibrio que iguala las cantidades demandadas, a las cantidades ofrecidas en un determinado tiempo. En competencia perfecta, por lo tanto, ni el comprador, ni el vendedor individualmente pueden influir en los precios del mercado.
Para Samuelson y Nordhaus, “el mecanismo de mercado es un tipo de organización económica en la cual los consumidores y las empresas interactúan a través de los mercados para determinar los tres problemas centrales de la organización económica” (Samuelson & Nordhaus, 2010; 50). En este mecanismo, el sistema de precios ofrece toda la información para que los agentes económicos tomen decisiones en cuanto a la producción, comercialización y consumo de bienes y/o servicios que les permitan maximizar sus beneficios.
Los mercados están conformados por al menos, tres elementos: la demanda de los consumidores, la oferta de los productores y el precio del bien o servicio (Gardebroek & Peerlings, 2009; 92).
La Demanda y la Oferta
La demanda muestra la cantidad de bienes y/o servicios que los individuos desean consumir a un determinado precio para satisfacer sus necesidades. La relación entre la cantidad y los precios es inversa porque a mayores precios, el consumo de un determinado bien disminuirá; mientras que los precios bajos motivarán al consumo de un determinado bien. Esta propiedad que recibe el nombre de Ley de Demanda Decreciente, es explicada por Samuelson y Nordhaus en los siguientes términos:
Ley de demanda decreciente: Cuando sube el precio de un bien (y se mantiene al mismo tiempo todo los demás constante), se demanda menos o, lo que es lo mismo, si los productores deciden lanzar una mayor cantidad de un bien al mercado, entonces –ceteris paribus– solo se puede vender a un precio más bajo que el de ayer (Samuelson & Nordhaus, 2010; 74).
La demanda, además del precio y las cantidades demandadas de un bien supone otros factores condicionantes como: el tamaño y estructura de la población, precios de los bienes sustitutos y complementarios, ingreso de los consumidores, gustos y preferencias, influencias especiales (por ejemplo: el clima, expectativas, etc.), entre otros. Su representación gráfica es la curva de la demanda que muestra la relación inversa entre precios del mercado y las cantidades consumidas de un determinado bien.
Por otro lado, la oferta muestra las cantidades de un bienes y/o servicio que los productores están dispuestos a vender, a los precios de mercado en un periodo determinado; su representación gráfica es la curva de la oferta que según Samuelson y Nordhaus, “expresa la relación entre precio de mercado y las cantidades del bien que los productores están dispuestos a ofrecer” (Samuelson & Nordhaus, 2010; 76).
Los desplazamientos en la curva de la oferta puede darse por cambios en los factores diferentes al precio,que influyen en la misma como son: los cambios tecnológicos, los costos de producción, precios de los insumos, política gubernamental, condiciones climáticas –en el caso de los productores agrícolas–, entre otros. La sumatoria de las ofertas individuales constituye la denominada oferta de mercado u oferta agregada
El Sistema de Precios
 
La interacción de la demanda y la oferta, determinan el precio de equilibrio de mercado; Samuelson y Nordhaus, al respecto escriben: “precio de equilibrio es aquel al que la cantidad ofrecida voluntariamente y la demandada voluntariamente son iguales. En un mercado competitivo, este precio de equilibrio debe estar en el punto de intersección de las curvas de oferta y demanda” (Samuelson & Nordhaus, 2010; 79).
 En la gráfica I. se muestra la combinación de las curvas de demanda y oferta, que determinan el precio (pa*) y la cantidad (qa*) de equilibrio (Punto A*). A un precio mayor al de equilibrio (pc), los productores estarán incentivados a incrementar su producción, mientras que los consumidores disminuirán su demanda. Por lo contrario, un precio menor al de equilibrio, incentivará al consumo, mientras que los productores disminuirán su oferta.
En el primer caso, se produce un excedente de mercado y para disminuir ese excedente los productores reducirán el precio de las mercancías; mientras que, en el segundo, se produce una escasez de bienes, en donde los consumidores estarán dispuestos a pagar un precio mayor para que los productores aumentan la producción, restableciendo de esta forma la situación de equilibrio inicial.
Según la literatura económica esta estructura de mercado resuelve los tres problemas básicos de la economía: ¿Qué producir?, ¿Cómo producir? y ¿Para quién producir?, tomando en cuenta el conjunto de precios y las cantidades determinada por la situación de equilibrio de mercado en cruce las curvas de oferta y demanda.
El supuesto de mercado perfectamente competitivo referido al inicio de este acápite, no se cumple porque, en realidad no existe equilibrio entre compradores y vendedores debido a la presencia de agentes económicos que inclinan los beneficios a su favor con la concentración de procesos productivos para la exportación en pocos países que se traducen en la creación de monopolios y oligopolios; además los precios, por lo general, son determinados por quienes posee el poder en el mercado (empresas transnacionales y países desarrollados).
Esto no es ajeno a la realidad económica del país, para ello analizaremos la dependencia del Ecuador al mercado internacional en el caso de un producto específico: el trigo, que en los últimos tiempos se ha convertido uno de los principales productos de importación, y alcanza el 98% de los requerimientos internos (INIAP-Senplades, 2008).
III.        El Mercado de Trigo en el Ecuador
La economía ecuatoriana, caracterizado por ser pequeña y abierta al comercio mundial, cuenta con una dotación de recursos naturales aptos para la producción de materias primas agrícolas, como por ejemplo el trigo, sin embargo, este producto ha pasado de ser uno de los cultivos más importantes a ser uno de los principales productos de importación.
Según Gaybor, “el problema del mercado de alimentos en el Ecuador, se debe a que, la mayoría de cultivos, dirigidos al consumo interno del Ecuador, tales como arveja, cebada, fréjol, maíz suave, yuca, y además la papa, presentan rendimientos inferiores, considerando los rendimientos alcanzados en años pasados” (Gaybor, 2011). Así mismo, el caso del trigo no es la excepción en el Ecuador, que durante siglos, fue autosuficiente en su producción; en los años sesenta, el Ecuador, se hizo dependiente de la ayuda alimentaria que recibió desde los Estados Unidos de este cereal (Red por una América Latina Libre de Transgénicos).
Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), en la actualidad de las 11.758.287 hectáreas aptas para la producción agropecuaria, tan solo 14.798 hectáreas se dedican a la producción de trigo, mismas que permiten abastecer el 1.23% de la demanda interna (Ver Anexo), por lo que se torna necesario recurrir a la producción extranjera del grano.
En los últimos años las importaciones de trigo han crecido en un 32,29% pasando de 414.106 toneladas en el 2000 a 611.548 toneladas en el 2010, por lo que se el país se vuelve totalmente dependiente de los factores externos del mercado.
La demanda de trigo en el Ecuador, principalmente lo constituye la industria procesadoras de alimentos (panificadoras y molineras), sin embargo también existe una pequeña cantidad de la producción que fue destinada a la exportación, en años pasados, según FAOSTAT.
Uno de los factores que la literatura toma en consideración como una posible causa, para la dependencia de las importaciones de trigo por parte del Ecuador, se debe a que, en el año 2000, el Programa Mundial de Alimentos distribuyó ayuda alimentaria en el Ecuador, con una cantidad de 161.000 toneladas métricas, y en todo el mundo la ayuda alimentaria otorgada, en el año 2000 fue de 10.229.000, el tipo de productos se trataba principalmente de leguminosas y cereales, en el caso del trigo la ayuda alimentaria representó 4.778.000 toneladas métricas (Acción Ecológica, 2002).
Fuente: Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO (FAOSTAT).
Elaboración Propia.

La ayuda alimentaria se generó en Estados Unidos, bajo el nombre de la Ley Pública 480, conocida también como Alimentos para la Paz, el cual tenía el objetivo de combatir el hambre y la mal nutrición, además de expandir sus mercados, promover el desarrollo sostenible, el desarrollo agrícola, así como promover el comercio internacional (FAS USDA, 2008). “La Ley Pública 480 (Título I Asistencia económica y seguridad alimentaria) de los Estados Unidos se instituyó formalmente en 1954, bajo esta ley, altas cantidades de cereales fueron entregadas a países en vías de desarrollo, bajo programas tales como el conocido Programa Mundial de Alimentos, con el objetivo de colaborar con desastres naturales y épocas de hambruna” (Rhoades, 2006).
Así pues, las ayudas alimentarias, son una iniciativa noble, sin embargo, la sobrevivencia de la población beneficiaria, es temporal, por lo que, al recibir grandes cantidades de un producto determinado, en este caso el trigo, desalienta la producción local, y crea dependencia en el país receptor de alimentos importados, de igual manera cómo podemos ver en el Gráfico II, las altas demandas del Ecuador, se deben a que en muchas ocasiones, la ayuda alimentaria, crea una modificación en los hábitos de consumo (Red por una América Latina Libre de Transgénicos). Por ejemplo:
[…] En Bolivia, en 1970 las donaciones eran de 5.614 toneladas. En 1990, estas subieron a 233.474 toneladas. [Producto de esto] se ha desalentado la producción local. Hoy el boliviano come menos variado y la mitad de lo que comía hace 20 años. El 67% de la alimentación proviene de las donaciones […][1].
Por otro lado, se cree también que la producción de trigo dejó de abastecer el consumo interno, debido a que esta fue desatendida, debido a que los gobiernos empezaron a confiar en los  ingresos por el petróleo, inicialmente la superficie dedicada al cultivo de trigo era de 100,000 ha, mientras que hoy esas miles de hectáreas se han reducido a unas cuantas (Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo, 2010), lo que evidentemente perjudicó al Ecuador, y lo obligó a convertirse en un país netamente importador, con cero exportaciones a su favor, tal como se observa en el Gráfico II, y de esta manera, con mayor salida de divisas.
Fuente: Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO (FAOSTAT).
Elaboración Propia.

Así pues, los excedentes de producción de los Estados Unidos, son vendidos en el mercado interno del Ecuador, perjudicando así la producción local, que como se puede observar en el Gráfico III, el cual indica que las importaciones, más la producción local, representan el total de la oferta en el Ecuador; se observa como las importaciones superan considerablemente la oferta local, el abastecimiento actual del trigo, se da por las importaciones, que representan el 96% (Salgado, 2001).
Según Salgado, Estados Unidos entre 1954 y 1956, se convirtió en el primer exportador de granos, y controló el 40% del mercado mundial de cereales, así mismo, en 1960 y 1962 pasó a controlar el 50% y entre 1971 y 1972 controló el 75%; mientras otros países subsidiaban sus exportaciones de trigo como producto relevante en los programas de ayuda alimentaria a partir de 1971 hasta 1983. Por otro lado el Ecuador, subsidiaba las importaciones de trigo (Salgado, 2001). 
De esta manera, los países en vías de desarrollo en el 2004 recibieron el 86% de su ayuda alimentaria por parte de los Estados Unidos, sin embargo existen acuerdos mundiales acerca de enviar la ayuda alimentaria en efectivo, oponiéndose a esta iniciativa, los Estados Unidos (Gauster). Por otro lado, en el año 2010, Ecuador importó trigo de Estados Unidos el 96.15% del total de sus importaciones (INEC, 2010).
Se considera que el objetivo de la ayuda alimentaria de los Estados Unidos, fue implantar la hegemonía de compañías transnacionales que dominan el comercio mundial de cereales, tales como Cargill y Archer Danield Midland, si bien el gobierno de los Estados Unidos, diseñó esta política de ayuda alimentaria, habían entes privados con otros intereses, y esto explica, como la ayuda alimentaria coincidió con la expansión de compañías transnacionales (Fundación Giulia Adinolfi-Manuel Sacristán).
Fuente: Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO (FaoStat), IndexMundi  
Elaboración Propia.

                En el Gráfico IV se observa la tendencia creciente de los precios mundiales de trigo; es notorio la elevación de los mismos durante el 2008, debido a la crisis mundial, en donde se alcanzó una cifra record, USD 325,94 por tonelada métrica; la volatilidad de los precios de las materia primas agrícolas se deben también a las sequias en la Federación de Rusia, y a las altas precipitaciones en Estados Unidos, evidentemente esta última fue la que más afecto al Ecuador, porque es de este país de donde se recibe la mayor cantidad de suministro de este cereal. En el año 2009, los gobiernos instituyeron políticas, en las cuales prohibían las exportaciones de cereales como el trigo y el maíz, para abastecer el mercado nacional, lo que provocó el aumento del precio en mercados dependientes como es el caso del Ecuador (FAO, 2010).

                Entonces la volatilidad de los precios, puede deberse como se mencionó anteriormente en los casos de Estados Unidos, y la Federación de Rusia, al cambio climático; otro factor a considerar es la expansión en la producción de biocombustibles, con el uso de cereales. (FAO, 2010).

                Al depender de las exportaciones de estos países, Ecuador tiene también que someterse a los precios internacionales, perjudicando de esta manera al abastecimiento de esta materia prima utilizada para la elaboración de pan y de harinas, que se reflejan en una alza de precios de estos bienes finales repercutiendo, por ende a la economía de los hogares.

IV.       Principales conclusiones
El caso del trigo ecuatoriano, ya no es un simplemente un problema nacional, sino un problema mundial, debido a que las demandas internas son extremadamente altas y la oferta con la producción local, no abastece el consumo interno de trigo, estamos sujetos a las variaciones en los precios en el mercado, y principalmente sujetos a la producción y oferta de trigo de los Estados Unidos. Es importante tomar en cuenta que las ayudas alimentarias otorgados a través de programas como la Ley Pública 480 y en programas como el PMA (Programa Mundial de alimentos), ha causado una modificación en los hábitos alimentarios de la población ecuatoriana, y un aumento en la dependencia de este cereal.
Países desarrollados, con el objetivo de expandir los mercados de la producción bajo subsidio de sus cereales, ha implantado estas políticas de ayuda alimentaria; en el documento podemos observar la alta dependencia de importaciones (96% aproximadamente) de los Estados Unidos. Vinculado a esto, la producción de compañías transnacionales como es el ejemplo de Cargill, de esta manera nos encontramos en un mercado de competencia imperfecta, con la imposibilidad de competir con compañías transnacionales, con la casi nula producción local de trigo.
Los gobiernos deben crear políticas que colaboren con la soberanía alimentaria, y deben tomar en cuenta, que el cambio climático es un factor relevante al momento de decidir en estas políticas para la ayuda alimentaria. No es importante tan sólo contribuir con la seguridad alimentaria, que es lo que fielmente impulsa la FAO, sino con la soberanía alimentaria, que es imperante en nuestros pueblos, con el objetivo de mitigar el hambre y la malnutrición, no sólo de manera temporal, sino de manera permanente; por tal motivo los países proponen que la ayuda alimentaria, sea otorgada en efectivo, porque como se mencionó, esto permitiría la compra de alimentos aptos y acordes culturalmente, y evitara la dependencia de ciertos alimentos a largo plazo.

V.        Anexos

Fuente: Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación FAO (FaoStat), IndexMundi  
Elaboración: Propia.
Nota: TM= Toneladas Métricas

                                    


VI.       Bibliografía
Acción Ecológica. (2002, mayo). Acción Ecológica. Ayuda Alimentaria y organismos transgénicos,          85-99.
América Economía (2012, enero). Ecuador busca retornar a la sustentabilidad en trigo.                 http://www.americaeconomia.com/negocios-industrias. Fecha consultada: 21 de        diciembre del 2012
Banco Central del Ecuador. Estadísticas Macroeconómicas/Publicaciones. www.bce.fin.ec. Fecha         Consultada: 21 de diciembre del 2012.
Call, S.,Holahan, W. (1985).MICROECONOMÍA. Grupo editorial Latinoamericano. 
Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo. (2010). CIMMYT. Consultado: 22 diciembre     de 2012, http://www.cimmyt.org/es/boletin/231-2010/872-ecuadors-wheat-awakening
FAS USDA. (2008, abril 14). FAS Online. Consultado: 22 de diciembre 2012,                 http://www.fas.usda.gov/excredits/foodaid/title%201/pl480ofst.html
FAO. (2010). La Alimentación y la Agricultura Mundiales. 1-22.
Fundación Giulia Adinolfi-Manuel Sacristán. Mientras tanto. Barcelona: ICARIA.
Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. III Censo Nacional Agropecuario. www.inec.gov.ec              Fecha Consultada: 22 de diciembre del 2012
Gardebroek, C., Peerlings, J. (2009). ECONOMICS OF AGRIBUSINESS. WageningenUniversity. 
Gauster, S. (n.d.). Acción Ecológica. Consultado: 21 de diciembre de 2012,                 http://www.rallt.org/organizaciones/pma/pma19.html
Gaybor, A. (2011, marzo). Camaren. Consultado: 22 de diciembre de 2012,                  http://www.camaren.org/documents/aguayagricultura.pdf
Guerrero, T. (2008). ECONOMÍA AGRARIA. Universidad Nacional de Loja, Editorial Universitaria-           UNL.
IndexMundi. Precios Mundiales de Trigo. Wheat-Daily Price-Commodity Prices-Price Charts, Data,       and News-IndexMundi.mht. Fecha consultada: 22 de diciembre de 2012
Organización de la Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación: Datos estadísticos     www.fao.org/faostat
Red por una América Latina Libre de Transgénicos. (n.d.). Rallt. Consultado: 20 de diciembre de            2012, http://www.rallt.org/organizaciones/pma/aa%20yorganismosmodfgent.pdf
Red por una América Libre de Transgénicos. (n.d.). Ayuda alimentaria y los organismos              geneticamente modificados. 1-14.
Rhoades, R. (2006). Desarrollo con Identidad. Comunidad, cultura, sustentabilidad en los Andes.          Abya Yala.
Samuelson, P., Nordhaus, W. (2010). ECONOMÍA. México D.F, McGraw-Hill.
Salgado, W. (2001). Ayuda alimentaria? o Ayuda a las exportaciones? Ecología Política , 105-110.


[1] Red por una América Latina Libre de Transgénicos. (n.d.). Rallt. Consultado: 20 de diciembre de 2012, http://www.rallt.org/organizaciones/pma/aa%20yorganismosmodfgent.pdf

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu aporte es importante, opina y comenta sobre el tema de este post